sábado, 1 de noviembre de 2014

Clarabides + Gías + Veteranos – Mis primeros 3000 sin nieve

¡Qué ganas tenía de volver al Piri!

Por motivos familiares, hubo que dejar aparcadas las salidas de fin de semana durante una buena temporada.
Cuando se presentó la oportunidad, tenía ganas de hacer algo bonito pero sin complicaciones, así que convencí a Pablo para dejar la cresta de los Frondiellas , que él me propuso en un primer momento, por los Clarabides, unos de los tresmiles más fáciles del Pirineo según había leído. A fin de cuentas, hacía poco que se había matado un experimentado montañero en los Frondiellas (ver emotivo homenaje de su amigo Santiago Solá “santialpino” en este enlace : http://santialpino.blogspot.com.es/2014/07/homenaje-un-amigo-aguja-cadier-3022-m.html ) , y siempre es bonito descubrir un desconocido rincón del Pirineo, como el Valle de Estós lo era para mí.

Así que salimos el viernes 31 de Octubre hacia Benasque, con buena previsión para el sábado, y cambio de tiempo para el día siguiente a partir del mediodía...El de lameteoqueviene dijo que iba a ser el último finde sin nieve en el Pirineo, y no se equivocó. Nosotros, por si acaso, llevamos piolet y crampones.

Sábado 1 de Noviembre de 2014


Después de pasar la noche en nuestro querido soportal de Plan de Senarta (¡7ºC a día 1 de Noviembre, sobraban plumas del saco a mogollón!), cogemos el coche hasta el parking de Estós. Comenzamos a caminar aún con el frontal , a pesar de haber madrugado lo justito. No  problem, porque la primera parte se hace siguiendo pista cementada siguiendo el curso del río, sin pérdida posible, y además todo el camino está muy bien señalizado.




En breve llegamos a la Cabaña de Santa Ana…



Y ya con las primeras luces del día, vemos este cartel con dos posibilidades para llegar hasta el refugio de Estós. Nosotros optamos por el camino corto, taclaro...



Pasaremos por la Cabaña del Turmo, que como habréis leído en distintas reseñas, es la de la canción “20 de Abril” de Celtas Cortos . Ellos se lo pasarían de puta madre aquella noche que dice la letra, pero en la puerta hay un cartel bien hermoso indicando que es una propiedad privada, osea que nada de hacerse cuentas de dormir allí….





La verdad es que el camino hasta el refugio es muy bonito, rodeado de abundante vegetación. Vamos pisando huellas de quad, que imaginamos son del guarda del refu. Aquello de servirse de mulas o burros ha pasado a la historia. Menos “romántico” para nosotros, más práctico para el que tiene que trabajar, qué se le va a hacer…


La verdad es que cuando divisamos el refu casi ni damos crédito de lo rápido que se nos ha pasado, de lo ameno que es el camino (menos de 2 horas). Queda claro que los postes avisando de avalanchas de nieve no están puestos a capricho.



Una pequeña parada para beber y dejar el peso innecesario, incluidos piolet y crampones que parece que van a sobrar…



…Y seguimos hacia los Clarabides, nuestro objetivo del día junto con el Gías….


Remontamos hacia el torrente:



Pero luego tampoco tenemos muy claro el camino…



No hay senda evidente entre el caos de pedrolos , ni tampoco demasiados hitos. Nos pasamos un buen rato jugando a “¿Dónde está Wally?” a ver quién es el primero en divisar el siguiente.






Por delante llevábamos un grupete, pero se ve que están más perdidos que nosotros, porque no sé qué leches han hecho, que al final los tenemos por detrás (pero corriendo el aire entre nosotros, eh)…




Cagüen la ostia. Al final tenemos que sacar el mapa, para darnos cuenta de que el pico que vemos a la izquierda es el Gías, y que para alcanzar los Clarabides (el Gías lo haremos por la Normal, nada de experimentos) tenemos que llegar hasta el collado que se aprecia al fondo fondo.



Por fin aparece el pequeño ibón reflejado en el mapa, más bien charquilla el pobre…



…Y seguidamente el ibón ibón :


Ya no hay duda alguna de que vamos por el buen camino hacia el Puerto de Gías:



Y sólo resta subir y subir por tol empedrao…



Ya lo tenemos a mano izquierda a tiro de piedra (se puede escoger entre una gran variedad aquí ). Agudizando la vista se puede distinguir a un pavo bajando, con la silueta recortada sobre el cielo azúl.


Aunque el camino desde el refu hasta aquí no es que haya resultado muy bonito, la verdad es que las vistas hacia la otra vertiente compensan:


La verdad es que para mí este Clarabide Oriental es mi primer 3000 sin nieve, y se me hace un poco raro este ambiente tan “pedregoso”.
Ahora a por los vecinos, sin ninguna dificultad desde aquí, sólo andar:



Seguimos un poco más, aunque el siguiente ya no es 3000...



… Y por último, toca retroceder sobre nuestros pasos, para dirigirnos hacia el Gías, el plato “fuerte” del día, porque es el único en el que habrá que echar manos y ya no vale sólo con andar, aunque confío en que sea poca cosa según lo que he estado ojeando en interné…



Seguiremos las manchas de nieve que permanecen a la sombra, rodeándolo por la izquierda.


Por una vez muestro algo de instinto montañero, y distingo la chimenea de acceso:


Recogemos bastones y al lío. La verdad es que resulta muy fácil, con pasos de II a lo sumo con buenos agarres, y se hace en un periquete, es muy cortita.







Esta no es la cima...


Queda algo más pallá:


Vemos gente bajando de la cima del Clarabide Central,  ahora nos los cruzaremos a pie de chimenea.


Para la bajada siempre hay que llevar más cuidadín, pero en este caso se hace realmente bien y además no hay sensación de patio. Intentaré animar, sin éxito, a uno de los componentes del otro grupo que debe ser de los míos y no quiere acompañar a sus compis hasta la cima. El objetivo del blog es precisamente ese, animar a los “trepallinas” como yo sirviéndoles de referencia, pero claro, si no te conocen ,ya les puedes decir misa…





Por aquello de que un recorrido circular siempre queda mejor, y evitar a nuestras rodillas el descenso entre pedrolos del camino que nos ha traído hasta aquí, decidimos tirar por las pronunciadas rampas a pie del Gías…Nos arrepentiremos varias veces, porque no hay ni senda ni hitos, y justo hacia el final parece que todo son cortados y puede costar ver la salida. Con lluvias recientes no es recomendable, porque el terreno se deshace sólo con mirarlo. Con nieve menos aún, porque debe ser un sitio propenso a aludes.
Nosotros , con terreno seco, haremos unos cruces de piernas a causa de lo accidentado del terreno que ni la Lina Morgan, oyes.






Aquí ya a toro pasao. Desde arriba parecía que todo eran cortados y hasta que no te vas metiendo entre rocas no se ve la salida.Desde abajo es mucho más evidente, pero más de una vez hemos temido tener que darnos la vuelta y subir mucho de lo que habíamos bajado para encontrar el buen camino.


Aún nos queda un buen ratejo hasta el refu, pero ya por terreno “decente”:


En total sumaremos 10 horas de actividad, y unos 1700m de desnivel positivo. Tomar una cerve fresquita desde su terraza, viendo atardecer, será todo un lujo para rematar el día.



Domingo 2 de Noviembre de 2014

Después de tanto tiempo sin salir, la verdad es que apetecía un vivac chulo, pero hay que reconocer que donde esté el calorcito del refu y una buena cama…Para el día siguiente habíamos planteado dos posibilidades: o bajarnos a echar un ratejo haciendo algo de escalada deportiva, o tachar el Veteranos(o como reza en un cartel del refugio, Gemelo Oriental, que parece que hay polémica con los nombres). El estar bien descansados nos permitió plantearnos lo segundo, a pesar de lo muy tarde que sabíamos que terminaríamos por llegar a Madrid , pero para una vez que se sale , ¡qué coño!

Y encima con chulería, no te creas que nos pegamos el madrugón, no. Empezamos a caminar ya de día, sí señor. Así que esperemos que el tiempo que marca el cartel esté algo abultado , ¡glups!


Recorremos el mismo camino que nos trajo ayer de vuelta en nuestra circular…



Bañito de rayos de sol dándole vidilla a las fotos:



Dejamos el evidente sendero para cruzar la pedrera a la sombra, con cuidado de no perder la marca rojiblanca del GR-11




Cuando se alcanza el colladito, seguir de frente junto a una especie de “trinchera”, no desviarse a la derecha.



De ese modo podremos encontrar la pintada de “Coto de Caza” que nos servirá de referencia para tomar el buen camino de ascenso. Lo digo porque alguna vuelta tonta nos tocó dar…



Hasta aquí hemos llegado totalmente en solitario, parece que toda la gente que ha dormido en el refugio de Estós ha tirado hacia los Clarabides. Sin embargo, cuando nos damos cuenta, vemos que nos sigue un numeroso grupo que ha subido desde Viadós. No hubiéramos tenido más que esperar un momentillo para dar con los hitos jejeje.


Después de un buen rato por pedrera, por fin vemos el objetivo del día, no el que se aprecia en primer plano, sino el de más pallá.



Y por fin también las vistas mejoran y muestran algo que no sea piedra piedra piedra…



¡Qué monicos los ibones!



Después de ayer en el Gías estoy animao a echar algo de manos…¡pero sin pasarse ,eh!
Veremos a ver qué nos depara esto…



No es difícil, pero la roca está mucho más descompuesta. De todos modos, creo que perdemos hitos en algún momento y nos enriscamos más de lo necesario, porque a la bajada lo haremos más sencillo.  No creo que ningún paso supere el II y son bastantes aislados, sin continuidad. Sólo recuerdo tres pasos sobre plaquita más lisa donde había que prestar mayor atención. Después se trata de seguir una especie de cresta ancha y sin demasiado patio donde habrá que apoyarse de vez en cuando, pero no tanto como para tener que guardar los bastones en la mochila.



Tramo fácil …


De nuevo a echar manos…


…Y ya mismo estamos en la cima….



La foto de cima, a la vuelta. Ahora toca concentrarse en lo que queda hasta llegar al Gemelo, porque la cresta parece que se estrecha algo y gana un poquejo de patio.





Desde este punto , resulta evidente que la Normal a cima está cubierta de nieve. Pablo plantea la posibilidad de seguir por roca, pero después del embarque de ayer bajando del Gías, no me queda ninguna gana de aventuras y, seamos sinceros, estoy casi pensando más en cómo va a ser la bajada de regreso, que lo que nos queda hasta la siguiente cima…


Me convence para que lo intentemos un poco por la nieve a ver qué tal, y al principio no problem porque vamos siguiendo huellas.


 Pero cuando las huellas desaparecen, prefiero darme la vuelta …Tu sube Pablo, yo te espero al solecete.

Pablo cambia a roca…


…¡Y consigue su cima!




De nuevo la misma sensación de canelo en estos casos: joer, tenía que haber seguido un poco más a ver …
Pero, como he dicho antes, yo estaba pensando más en el regreso de bajada que en otra cosa.

Por el otro lado veo acercarse a un grupete :



A la vez que Pablo se reúne conmigo de nuevo:


El grupete pregunta a Pablo qué tal está la cosa para subir, y aunque es evidente que el tiempo está empezando a cambiar y están entrando cada vez nubes más compactas, deciden continuar:


Nosotros emprendemos el regreso sin entretenernos a picotear ni nada. Eso sí, ahí va la foto desde la cima del Veteranos que no saqué al subir:




Y pabajo.




Resulta que a la vuelta parece que encontramos mejor los hitos y lo hacemos más fácil
Bueno, por lo menos yo: Pablo parece que prefiere ir por lo más “entretenido”...



Venga anda, sácame una fotejo que no salgo casi nunca :


Lo único delicado a la bajada será el mismo paso que a la subida: la plaquita en travesía de 3-4 pasos que no hemos sabido/podido evitar
Ya de vuelta en la pedrera con marcas del GR-11...



Nos detenemos a mirar el camino por el que bajamos ayer del Gías. La verdad es que se ve empinao y con terreno muy suelto.
Eso tiene que ser zona de aludes en invierno segurísimo.



Deshaciendo el camino hasta el refu:





Recogemos el material que hemos dejado en el refu, y aprovechamos para comer con un refresco. Una pareja con camarón de la ostia pero cierto aire de "desubicaos" nos pregunta si en el refugio ofrecen comidas, y les indicamos que pregunten directamente al guarda, porque ya es bastante tarde y lo más que imaginamos que pueda ofrecerles es un bocadillo. Deben haber echado a andar sin ninguna planificación, se han debido quedar embelesados con el paisaje, y se les ha echado la hora encima. Pensamos que, si no se espabilan, se les va a hacer de noche bajando...

De hecho, nosotros ya vamos con la hora justita...





Preciosa estampa otoñal:




Llegaremos al coche a las 18:00, después de algo más de 10 horas como ayer, incluyendo igualmente paradas y despistes. Oscurece mientras recogemos todo, y esperamos que la pareja que hemos visto en el refugio no se haya entretenido mucho, pues tememos que no lleven ni siquiera una linternilla encima, aunque el camino no tiene pérdida.

El de la meteo dijo que sería el último finde para hacer 3000 sin nieve, y efectivamente al día siguiente la webcam del refu mostraba un panorama bien distinto al que dejamos...

Imagen desde el refugio de Estós 04/11/2014 mostrada en www.alberguesyrefugiosdearagon.com
















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