No tengo buen recuerdo del que fuera mi primer intento a un 3000, porque en aquella ocasión de hace 8 años, casi me deshidrato. Por un descuido, mi compi y yo salimos sin agua. Lo único que llevabamos para compartir entre los dos, era una botellita de medio litro, que inutilmente íbamos recargando con algo de nieve. Pero es que para colmo, ambos fuimos con petos tipo ski, en un puente de Mayo muy muy caluroso...Canelos totales, vamos. Recuerdo que al llegar a la antecima, le pedí un sorbo de agua a un señor:
-- Es que ...el agua la tiene que subir cada uno, majo. Dale un sorbito si quieres, pero no te pases ¡eh!
¡Tu puta madre! Porque la necesitaba como el aire que si no ...
En fin, agua pasada (jo jo jo). Esta vez me siento mucho mejor: salgo a correr de pascuas a ramos, dejé el tabaco que no hay cosa más tonta que esa, y ya sé lo que es subir algún 3000.
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Para completar el finde de un modo guapo, como ya hiciéramos con Los Infiernos, le comento a Rafa la posibilidad de escalar en Sacs al día siguiente o bien hacer una ferrata. Yo prefiero escalar , que para eso acabo de renovar mi cuerda, pero se vuelve a salir con la suya, y quedamos en hacer una ferrata.
Día 1
Salimos de Madrid a eso de las 16:00 aprox. cargados como mulas. A la altura de Guadalajara nos cae una lluvia muy fuerte, que nos obliga a ir lentísimos varios kilómetros. Después nos encontramos un atasco importante por accidente de camión, que nos retrasa bastante. Así q el viaje se nos hace algo pesado, y llegamos más de noche a la Besurta de lo que habíamos calculado. Dudamos entre acampar allí mismo, o subir hasta el refugio de La Renclusa con los frontales y así quitarnos casi 300m de desnivel para el día siguiente. Al final decidimos quedarnos en La Besurta, para así al día siguiente dejar todos los trastos en el coche y salir con lo mínimo.
Yo venía pensando todo el viaje en la pasta con atún que nos ibamos a meter para cenar…y al sacar los trastos me doy cuenta de que he olvidado el gas en casa. ¡Mecagüen! Nos tenemos que conformar con embutido y galletas. Ni siquiera vamos a poder tomar una infusión calentita antes de meternos al saco. Menos mal que por lo menos llevamos bien de pan.
El parking de La Besurta está hasta las trancas cuando llegamos, y no paran de llegar coches. La mayoría de la gente sube al refu con los frontales, no sabemos si a la aventura o porque tienen plaza reservada. A nosotros nos dijeron que estaba a tope y había lista de espera de 30 personas. Nos metemos en un cutre-iglú de esos de 25e, y cuesta coger el sueño entre el suelo duro y el ruido de los coches que van llegando.
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De repente, unos toques en las paredes de la tienda nos despierta sobresaltados. No se trata del viento.
-- Guardia Civil. Salgan de la tienda. Aquí no está permitido acampar.
Nos dicen que se puede dormir en saco , pero no montar la tienda con piquetas porque eso contamina... Ummmm te dan ganas de decir muchas cosas, pero te tienes que callar, claro. Sí de acuerdo, hemos hecho el gili poniedno piquetas, pero no creo que contaminen en absoluto, en comparación con la de coches que hay allí aparcados,algunos casi con las ruedas metidas en el rio, y la de mierda que hay alrededor del chiringuito: manchas de cemento en el suelo, material de construcción desparramado, por no hablar dela porquería acumulada en la pared de atrás. La nuestra es una tienducha en la que ni siquiera entran nuestras mochilas y no podemos estirar las piernas del todo, y les decimos que salimos parriba a las 5:00 am.
-->Ellos nos dicen que tienen que dar parte a la Dirección del Parque, y que ellos ya verán. ¡Po fale!
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Así pues, me veo haciendo mi primera noche "a saco descuierto", pero por desgracia el cielo está cubierto y
-->no puedo disfrutar de las estrellas. Día2
-->Amanece con algo de niebla, y cuesta creer que se vaya a cumplir la previsión metereológica, que promete un día estupendo. -->Para cuando nosotros terminamos de prepararnos y desayunar algo rápido, son las 06:00 y ya no hacen falta los frontales.
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Tan sólo unos minutos parriba y ya el parking se ve lejano...
Al refu de Renclusa se tarda tan sólo unos 45 min en llegar, por camino muy marcado. Creo que no hubiéramos tenido mucho problema subiendo de noche. La ventaja es que aunque vayamos a hacer más desnivel, vamos ligeros y no tenemos que dejar nada arriba. Eso sí, no vemos ni una sola tienda alrededor del refugio, lo cual nos extraña un poco estando a tope.
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Poco a poco se van disipando las brumas, y con los primeros rayos de sol ya se aventura un buen día de montaña.
El marcado camino hasta el refugio tiende a desaparecer entre bloques y bloques de piedras, que exigen en ocasiones dar grandes zancadas e incluso llegar a apoyar las manos en algún momento. Además de aventurarse un buen día, también se aventura la romería que es la Normal al Aneto...
Los primeros pasos se hacen bien sin crampones, pq aunque la nieve esté algo dura, la huella es muy profunda. Para encarar la primera pendiente, eso sí, decidimos calzar crampones y sacar el piolo a pasear. No es necesario, pero mejor no confiarse.
Nosotros en vez de seguir rectos, debemos desviarnos a la izquierda. Pero sin seguir ganando altura, como hacen algunos, porque si no sales por encima del Portillón, y luego tienes que bajar todo lo que has subido.
En el portillón hay que ayudarse un poco con las manos, pero vamos, sin ninguna complicación. Desde ahí ya se puede ver el Aneto.
Parece que está ya cerca el jodio,¿eh? ¡Una mierda! Queda un señor paseo aún. Eso sí, se hace bien pues la pendiente es muy suave. Aunque no lo parezca, teniendo en la retina los de Alpes, delante de nosotros tenemos un glaciar que atravesar. En la siguiente imagen se ve el paso del Portillón (foto de Rafa).
Así ,poco a poco y cada vez más sobraos de ropa, se avanza hacía el Rey de los Pirineos, por marcada huella.
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Al llegar a las últimas rampas ya se tiene la sensación de estar al lado, pero justo ahí es donde hay que apretar un poquejo. No es que sea mucho, pero se nota que para entonces ya lleva uno sus horas de pateo.
Un último empujoncillo final…. (foto de Rafa)
Y ¡ale!, por fin llegamos a la antecima, desde la cual vemos la típica imagen del temido Paso de Mahoma.
Sin demora, nos disponemos a cruzarlo en cuanto termine el grupo de franceses antes de que empiece a llegar gente. Ahora mismo está casi vacio y eso es un lujo. Tan sólo llevamos un montañero delante de nosotros.
No es que el señor se esté rascando un güevo a lo oso Grizzly o desahogándose con el pedrusco, no. Es que es la mejor forma de dar ese paso. El Paso de Mahoma no impresiona tanto como en las fotos y videos. La verdad es que hay mucho “cacho” para agarrarse. A la vuelta sí que impresiona algo más, siendo justo este punto , con el paso a caballo, quizá el que más raro se le hace a uno.
Hombre, está claro que si se te va el pie más de lo debido, no lo cuentas. Yo preferí ir con crampones, que a mí la suela sobre nieve o mojado me da más repelús, y sin problemas con cuidado de no tener ningún enganchón tonto.
Superado el paso, nos hacemos la foto de rigor con la cruz característica, que como ocurriera con el paso , tenemos el lujo de tener para nosotros solitos.Desde allí vemos a una pareja que viene del Estasen. ¡Qué envidia!
Alguna foto desde la cima:
Volvemos sobre nuestros pasos, comemos un montadito en la antecima, y nos despedimos del Paso de Mahoma, que nosotros no vamos con tablas de ski (como casi nadie hoy) , y aún nos queda tol pateo de vuelta. Hemos hecho cumbre en unas 5 horas, con unos 1500m de desnivel pal cuerpo, así que vamos muy bien de tiempo.
Al poco de comenzar la vuelta, vemos una huella que se separa de la “autopista” hacia el Portillón, y que enfila muy directa hacía el cauce que veíamos desde la cima. Rafa me dice que parece llevar hacia el Aiguallut , y que le parece buena idea.
-- Llevamos agua, comida, y tenemos tiempo de sobra, pues vamos pallá.
¡Bien dicho Rafa! Pues pallá que vamos. La nieve, que ha estado excelente durante toda la subida, sigue estando en su justo punto: suficiente para clavar talones, pero nada de hundirnos hasta la rodilla. Así que bajamos a toda ostia. Estamos atravesando el glaciar a nuestra puta bola, pero parece que nadie le toma en serio al pobre (foto de Rafa)
Disfruto de la sensación de estar en la morrena del glaciar, el punto donde se siente que está vivo, en movimiento.
Colgamos los crampones de la mochila para que se vayan secando , y atravesamos el laberinto de enormes cantos guiados por los hitos, que nos llevan hacia la derecha.
Tooooooda esa bajada hay que hacerla por la DERECHA, por donde llevan los hitos. Los cauces deben quedar siempre a la izquierda. Los hitos se ponen para algo, y siempre hay alguien que hace el canelo y pasa de ellos.
-- Oye Rafa , debe ser por el otro lado – le digo al ver a una pareja que viene en sentido contrario al otro lado del cauce.
¡Señoooorrrrrr! Por qué no me metería la lengua en el culo …
Aquel error nos iba a llevar a tener que cruzar varios cauces una y otra vez, intentando encontrar el camino correcto. ¿No querías piedras mojadas? Pues ale, a cruzar los cauces una y otra vez. En algún paso, tuve que volver sobre mis pasos porque no me atrevía a cruzar por donde Rafa, y en otros, me tuvo que echar el bastón para ayudarme. Una mierda de camino, de no ser por estas vistas tan espectaculares.
Esas vistas son realmente increíbles. A pesar de los continuos cruces de cauces, estaba muy contento de haber tomado la decisión de bajar por allí. Eso sí, en cuanto dejamos los bloques de piedras atrás y llegamos a la pradera, no pude más que besar la tierra como si fuera Juan Pablo II.
Parece mentira que vengamos desde lo alto del todo.
Y por fin, después de 9 horas de pateo con muy poquito tiempo de paradas y 1600m de desnivel acumulado, llegamos al coche. Lo primero que hago, es comprar un par de cervezas fresquitas en el chiringuito. Lo segundo, proponerle a Rafa irnos a Benasque a meter algo pal cuerpo como Dios manda, como unos huevos fritos con chorizo. Son las 15:00 aproximadamente, y hasta que lleguemos allí nos darán las 16:00, no sabemos si demasiado tarde quizá para que nos den de comer. Pero lo intentamos…y lo conseguimos.
Un día perfecto, no se puede pedir más.
Aún nos queda mucha tarde por delante para perrear un poco por Benasque. Como cualquier parejita, nos dedicamos a visitar tiendas de montaña. Barrabés es la caña, ¡pero qué precios! Compramos un cartucho de gas para la cena, y nos clavan 6.5e , mientras que en Decathlon salen a 4,5e de la misma marca. Se pasan un poco ,¿no?
Rafa piensa en pillar un kit para ferrata. El más barato sale a 50e y a mí no me apetece gastarme eso , pues hace 15 días que me he dejado 167e en renovar cuerda, cesta y un par de mosquetones. Al final se lo pilla, y yo pienso en llevar mi cabo de anclaje, y si se pone la cosa fea, que me eche la cuerda de rando.
Día 3
Nos despertamos pronto, pero sin prisas. En Barrabés nos han recomendado la ferrata de Sesué en vez de la de Sacs. Apenas son 15 minutillos en coche, osea que sin problemas.
Un poquejo de nervios porque he leído que tiene varios desplomes, y al final este cabrón va con disipador y yo casi a pelo como quien dice. Cuando llegamos no hay nadie, y tenemos la suerte de que ya le pega el sol (la foto está tomada en la bajada de regreso al coche y por eso se ve gente, pero en realidad vinieron bastante después de haber subido nosotros).
Impresiona, se ve mucha pared, pero bueno, las ferratas estas tienen hierros parar agarrarse por todos lados, ¿no? Pos venga, parriba, que pa eso hemos venido. Eso sí Rafa, tu el primero no sea que me tengas que echar la cuerda por arriba ;-)
Empieza bien la cosa, pero en seguida desaparecen los hierros y hay que hacer un tramito ayudándose de las presas naturales (foto de Rafa)
¡Joder! No es difícil, pero no quiero caerme, que el de Barrabés dijo que son caídas de factor 2 y ya me dejó intranquilo. Nada, nada , yo echo mano al cable de vida cuando lo veo chungo. ¡Si no que no lo hubieran puesto! (foto de Rafa, que bien me ha pillao infraganti el cabrón, no tiene corazón)
Cuando vuelven los hierros, uno se queda mucho más tranquilo, aunque sea en desplome. ¡Que gusto da eso de tener donde agarrarse como Dios manda! (foto de Rafa)
Eso es ya muy fácil, y en seguida se llega al final , de donde se tiene una bonita vista, aunque ya sin cumbres alrededor, porque estamos alejados de la zona de tresmiles.
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