Me gusta reservarme algún día de vacaciones por Reyes para llevar a los niños a jugar con la nieve. Este año, nuestra Sierra está bastante pelailla por estas fechas, así que busco por interné alguna ruta con niños por Madrid, y me encuentro con la Ruta de las Cabañas en La Barranca:
Construcciones con troncos para amenizar el recorrido y que los niños se entretengan, poca distancia y desnivel, y agradable zona con mesas en el entorno de la Fuente de la Campanilla para almorzar, que ya conozco de cuando hicimos la invernal a la Maliciosa por el Tubo de Todos ...
¡Pues tiene buena pinta, oyes!
Más info en estos enlaces:
http://www.lookingformaps.com/mapa.php?mapa=La-Barranca-con-ninos-ruta-de-las-cabanas
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3438628
Las imágenes son aún peores de lo habitual, porque la cámara se quedó sin batería y están hechas con mi cutre-móvil.
Dejamos el coche en el Parking situado a la altura del Hotel La Barranca. Al no ser fin de semana, sólo encontramos cuatro coches, pero nosotros, por si acaso, hemos madrugado algo, que en la CAM no se puede uno despistar mucho...(de hecho, a la bajada el panorama será bien distinto).
El día sigue la tónica del eterno anticiclón que nos visita estas fechas: despejado y con temperaturas agradables hacia mediodía, pero fresco amanecer tras helada nocturna.
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Recorremos la margen derecha del embalse entre matorral...
Cruzamos una segunda puerta:
...Y nos adentramos en un bonito bosque. A partir de aquí, lo único que tenemos que hacer es seguir las marcas de pintura verde y blanca. El camino está muy bien señalizado, y abundan las pintadas en los troncos de los árboles o piedras.
Al poco aparece la primera estructura, la más incompleta de todas, pero que sirve para instruir a los niños sobre cómo aprovechar un tronco caído:
¡La siguiente sí que es a todo confort jejeje! Uno se imagina tumbao dentro al calor de un fueguecillo en plan tipi indio:
Cruzamos el arroyo con cuidado de no meter las botas, que con el frío que hace eso implicaría el fin de la excursión:
En la siguiente, empleamos algo de tiempo en completar la estructura. Hay muchas ramas cerca y los niños se lo pasan fenomenal. El sol y el ejercicio nos permiten cambiar abrigo gordo por chaleco.
Más tarde, proseguimos el camino hacia el Mirador del Peñotillo:
A partir de aquí se nota que el camino asciende, y al solete, sobra más ropa:
Me da la impresión de que las marcas nos están llevando a los riscos a nuestra derecha, alejándonos cada vez más de la ancha pista por donde sé que tenemos que bajar...Así que cuando llegamos a este punto (creo recordar que ponía "Mirador de los Alborchones" en el cartel que se observa en la peña, soy malísimo con los nombres), les digo a los niños que me esperen y me adelanto a "investigar" el camino.
Pero en cuanto me pierden de vista, se asustan y salen corriendo detrás de mí entre gritos de "papá, papá".
Bueno ,pues nada, seguiremos las marcas del camino. Yo lo hacía por ahorrarles unos posibles metros de desnivel...
En la imagen se puede observar el embalse, y un poco más abajo, el parking de tierra donde dejamos el coche.
Salimos a una zona llana desde donde podemos observar los característicos "Cohetes de la Bola del Mundo" con sus franjas rojas y blancas, y la poca nieve que hay para esta época del año :-(
Me vuelvo a adelantar, y menos mal, veo que algo más adelante las marcas nos llevan hacia la izquierda (según encaramos las paredes rocosas), y el camino comienza a descender.
¡Sorpresa! ¡Hemos bajado directamente a la Fuente de La Campanilla!
Detrás de la reja hay un cordel para tirar de la campana y, si se quiere, pedir algún deseo.
Uno de mis chicos dice que la situación le recuerda a Rodrigo Rato tocando la campana de Bankia.
El muy #%@+$ luciendo sonrisita encima...
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| www.elperiodico.com |
Aprovechamos las mesas de los alrededores para almorzar, y visitamos la última de las cabañas de nuestra ruta, al lado de la Fuente.
Emprendemos el regreso, ya por cómoda "autopista":
Nos encontramos con un excursionista con un tremendo mochilón que nos pide comida que nos haya podido sobrar,ya que está haciendo una ruta en solitario de varios días por nuestra Sierra, y la verdad es que no es mucho lo que le podemos dar: media bolsa de Matutanos, un paquetillo de Oreos, y medio sandwich mordisqueado. Por algún motivo, supongo que instinto paterno, no le doy dos batidos que también llevamos encima, aunque luego me arrepentiré...La idea es rematar el día escalando algún pedrolo, y los reservo para mis chicos, aunque desde luego a ellos no les hace ninguna falta. En fin...
Seguimos bajando por las instalaciones del parque de aventura "De Pino a Pino", donde vemos la valla destrozada, con pinta de haber sido más asaltada que la de Melilla
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| Unos intentando buscar un porvenir, otros defendiendo nuestros privilegios de primer mundo, y mafias enriqueciéndose a costa de la desesperación de los demás... |
Cogemos el coche, y terminamos el día practicando en una pared muy facilita para niños que hay camino a la cercana Majadilla Verde. Después de las 5 horas que hemos invertido en la rutilla (con muchas paradas, incluídos picoteos y juegos en las cabañas), me sorprende que les queden ganas, pero son ellos los que me insisten. ¡Bravo chicos!
No habremos podido hacer nuestro muñeco de nieve, pero hemos pasado un estupendo día de montaña familiar, para que de algo menos de penilla el fin de las vacaciones y la vuelta al cole al día siguiente...
;-)
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